Mejora de la cobertura de necesidades básicas mediante la construcción de infraestructuras de saneamiento ambiental y de suministros de agua potable en seis comunidades del Municipio de Florida

La escasez de agua representa una de las principales necesidades de las comunidades rurales hondureñas, siendo necesidad básica cada vez más difícil de satisfacer ya que progresivamente van desapareciendo las fuentes productoras.

Para el diseño del proyecto se ha tomaron como espacio de referencia la microcuenca, que incluye la quebrada o río del cual las comunidades obtienen el agua, sus laderas (el uso que se hace de ellas) y las comunidades que las habitan.  

El proyecto abordó el problema del acceso deficiente de los habitantes de 6 comunidades al consumo de agua potable, tanto en cuanto a la cantidad y calidad del agua que se consume como en cuanto a las infraestructuras para el suministro al interior de las viviendas.

Las  dos microcuencas involucradas en este proyecto, estaban afectadas por la actividad de los habitantes de estas 6 comunidades instaladas en su interior provocando la degradación, deterioro y progresiva desaparición de las fuentes productoras de agua. Las causas de su degradación tienen que ver con el inadecuado uso y manejo de los suelos, uso excesivo de agroquímicos, prácticas tradicionales utilizada en la labores agrícolas y ganaderas, la deforestación provocada por la tala indiscriminada del recurso forestal para su comercialización o su consumo, así como las perdidas de este recurso por los incendios forestales que son provocados en cada época de verano. Simultáneamente a la progresiva pérdida de agua en la microcuenca, se producen bruscas variaciones en su caudal provocando frecuentes desbordes durante la temporada de lluvias y su práctica desaparición durante la temporada seca. Las dos microcuencas también se veían afectadas por altos niveles de contaminación provocados por los vertidos de excretas, productos químicos empleados en la agricultura, aguas empleadas en el beneficiado del café (aguas mieles), aguas servidas de las viviendas y basura, etc

El primer componente del proyecto ha ido, por tanto, dirigido al mejoramiento y protección de los recursos de las dos microcuencas, con la elaboración de un Estudio biofísico de ambas microcuencas que ha servido de insumo para la elaboración del Plan de acción para el manejo de ambas. El Estudio biofísico es un documento en el que se detallan los usos potenciales y actuales del suelo de la microcuenca, y el Plan de acción para el manejo incluye el diseño y planificación de diferentes actividades para la mitigación de las áreas y puntos críticos de contaminación y garantizar una gestión eficiente y sostenible de los recursos naturales presentes en ella, en función de las necesidades de las personas que los usan de manera directa e indirecta.

Paralelamente se comenzó la construcción de 136 letrinas de cierre hidráulico, que han evitado la contaminación de las cuencas de agua, mantos freáticos y aguas subterráneas por vertidos de excretas. También se instalaron 147 hornillas mejoradas para reducir en un 40% (mínimo) el consumo de leña en los hogares lo que permitirá reducir la presión sobre el bosque como fuente de energía; además al instalarse una chimenea mejoran notablemente las condiciones habitacionales de los/as participantes.

Se han construido 142 filtros de aguas servidas y 66 filtros de aguas mieles que funcionan como filtros naturales para las aguas empleadas en las viviendas (servidas) y las aguas empleadas en el procesamiento del café (mieles) evitando su vertido incontrolado.

Como parte del proyecto, se diseñó un programa formativo orientado a mejorar la capacidad de gestión de las organizaciones locales que distinguía entre tres niveles de responsabilidad: comunitario, municipal e intermunicipal.

A nivel comunitario se trabajó con las 7 juntas de agua y los patronatos de las seis comunidades participantes. Recibieron capacitación en Manejo Integrado de microcuencas, Administración y sostenibilidad de sistemas de suministro de agua, Saneamiento Básico, Manejo sostenible de los Recurso Naturales y Organización y liderazgo.

A nivel municipal se trabajó con la Municipalidad de Florida (Alcaldía, Unidad Municipal Ambiental) y la asociación de Juntas de Agua del Municipio de Florida que agrupa a 40 Juntas de Agua.

Con respecto al nivel intermunicipal se celebró una gira de tres días, con los alcaldes que forman la Mancomunidad Cerro Azul, a Jesús de Otoro (Dto. Intibucá), localidad que ha implementado con éxito el “Pago por Servicios Ambientales” en los últimos años, en el que se celebró un taller sobre PSA y se conoció in situ la experiencia.  

Finalmente se optó por integrar los componentes de manejo integrado de las microcuencas con la reparación de los sistemas de agua y añadir un componente orientado a garantizar la sostenibilidad de los procesos iniciados, y que necesariamente pasa por el fortalecimiento de la capacidad de gestión de las organizaciones locales.