La Fundación Iberoamericana para el desarrollo (FIDE) y la organización hondureña Cooperativa Mixta de Mujeres Unidas Limitada (COMIXMUL) expusieron sus experiencias en la otorgación de microcréditos, en una conferencia que llevaron a cabo en la V Cumbre Mundial de Microcrédito en Valladolid.

Pilar Vereda, responsable de relaciones institucionales de FIDE explicó la trayectoria del trabajo conjunto entre ambas organizaciones e invitó al público a disfrutar de la proyección del documental Microcréditos en Iberoamérica, producido en Honduras, El Salvador, Perú, Bolivia, a fin de contar las buenas prácticas del microcrédito y darle voz a los expertos de las microfinanzas en España.

Posteriormente, Magda López, gerente general de COMIXMUL en su participación en la sesión conexa narró la experiencia que han tenido en Honduras con más de 20 mil mujeres que trabajan con sus microempresas.

López destacó que la capacitación y el buen seguimiento técnico son las claves han permitido a COMIXMUL brindar los productos microfinancieros a las mujeres, especialmente a las que viven en las zonas rurales y campesinas, además de las madres solteras y a quienes no han tenido acceso al sistema financiero formal.

“En COMIXMUL entendemos el microcrédito como una herramienta de empoderamiento, de desarrollo socioeconómico de las mujeres, necesaria para igualar el nivel de acceso y oportunidades en un país como Honduras, donde el machismo tiene presencia y en el que 70% de las mujeres forma parte de la base de la pirámide”.

COMIXMUL  lleva 20 años trabajando en proyectos de empoderamiento económico de las mujeres, con apoyo de la cooperación española.

Por su parte, Antonio Vereda del Abril, presidente de FIDE, ha propuesto la creación de un fondo de microcréditos en España,  para impulsar un millón de microempresas con las que se podría combatir el alto índice de desempleo.

Vereda del Abril explicó que para reducir el desempleo se necesita la creación de tres millones de puestos de trabajo a través de estas  autoempleo en microempresas, estimando un capital inicial medio por empleo de 10 mil euros. Este programa estaría dirigido a personas en situación de paro, especialmente a mujeres, jóvenes  e inmigrantes, que se han quedado sin empleo con la caída de la economía del ladrillo y la crisis financiera actual.