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“La difusión de los restos arqueológicos es importante para que los peruanos reconozcan su pasado” Entrevista a José Novoa

El director del documental "Las tumbas reales del Perú", sobre los hallazgos arqueológicos de la antigua cultura moche, visitó FIDE.

José Manuel Novoa Ruiz. Director de documentales de Explora films.

El descubrimiento, en 1987, de los restos arqueológicos de la cultura moche y la tumba de uno de sus gobernadores, el Señor del Sipán, constituyó un hallazgo de vital importancia en América Latina. El director de documentales José Manuel Novoa ha recogido esta investigación y ha plasmado esta desconocida cultura en el documental “las tumbas reales del Perú”. El film se presentó la semana pasada en Madrid.

 

Para quien no haya visto el documental ¿Qué va a encontrar en él?

Se va a encontrar con una cultura que probablemente no conoce, porque los moche son prácticamente desconocidos. Se trata de una cultura que se desarrolló en la costa norte del Perú entre el siglo I antes de cristo y el VI. Es una de las más sobresalientes de este periodo. Es sorprendente que supieran dorar el cobre, algo que en Europa se logró hacer a fines del siglo XVIII, o que supieran soldar, o toda la red de canales que hicieron para irrigar un desierto, un terreno en el que hoy se cultiva la mitad de las hectáreas que ellos cultivaban hace 2000 años. En sus construcciones ya empleaban técnicas antisísmicas, son obras titánicas, porque hablamos de pirámides hechas con ladrillos de adobe. En el caso de la pirámide donde se ha encontrado el señor de Sipán se calcula que son 88 millones de ladrillos.

 

Era una cultura, como todas de la costa peruana, que dependía mucho del fenómeno de El Niño. Cuando llegaba, era una catástrofe porque la gente no estaba preparada. Toda su cosmogonía venía dada porque entendían que los dioses eran crueles y que les enviaban estas catástrofes. Al mismo tiempo que era un pueblo con un gran desarrollo económico, es chocante que hiciera sacrificios humanos. La individualidad casi no existía, existía la comunidad y lo que intentaban era tratar de calmar la cólera de los dioses para que no lee mandaran desgracias y también para fertilizar la tierra. Era una cultura muy sobresaliente, que dio paso a otras como la de sicán, alambayeque, etc. y a los incas que es lo más conocido.

 

¿Qué rasgos de la cultura moche permanecen actualmente?

Quedan algunas creencias religiosas pero que eran anteriores a ellos, por ejemplo el tema chamánico, todavía hay supersticiones que perduran. En otras cosas cuestiones, está la pesca. La cultura moche utilizaba los caballitos de totora (un tipo de junco) que se siguen empleando hoy, así como las balsas de totora con las que se desplazaban hasta Ecuador o hasta el norte de Chile para hacer intercambios comerciales.

 

¿Crees que la difusión de los restos arqueológicos puede contribuir al reconocimiento de la diversidad cultural por parte de la población peruana?

Sin duda, es muy importante para que reconozcan quiénes son. Gran parte de la sociedad peruana no conoce su historia. Esto no es peyorativo, en España tampoco conocemos nuestra historia, todos los reyes, etc. Además, la divulgación es muy importante porque si se ve en todo el mundo habrá mucha gente que quiera ir a Perú a visitarlo porque es una cultura muy singular y muy rica. La labor que ha hecho Walter y su equipo es muy importante con la construcción del museo de tumbas reales del Sipán, que está considerado de los mejores de América. Constituye un lugar fundamental para conocer la historia de Perú. Hay que tener en cuenta que en esta cultura no se escribía, y a las culturas que no han escrito se les ha despreciado y además la información es mucho más difícil de obtener y es necesario interpretarlo.

 

¿Y puede favorecer este descubrimiento al desarrollo económico y social?

Si, sobre todo basado en el turismo. Con el Machu Pichu se ha conseguido atraer al turista, pero no se conocen otros lugares que se puedan visitar. Los descubrimientos pueden ser un granito de arena, pero ellos tendrán que hacer sus planes estratégicos y sus infraestructuras para que esas primeras visitas que ahora duran 3 días, sean más largas. Donde va el turista, se genera riqueza desde el que pone un restaurante, un pequeño hotel, el que hace un collar para vender, de guía etc. Creo que puede ser una contribución al desarrollo sostenible de la zona.

 

¿Y no rompería con su modo de vida?

Creo que no. Efectivamente hay que tener cuidado con esto pero ahí no rompe porque la cultura es similar. Los habitantes no van a ver algo que no conozcan, lo pueden anhelar pero no les resulta chocante.

 

 

¿Te ha costado filmar este documental entrando en su punto de vista y no desde el occidental?

En este caso no hay un punto de vista español o peruano, sino científico. Quizá los dos puntos de vista que ha habido son el del cineasta y el del arqueólogo con el fin de que la gente entienda lo que le estamos contando.

 

El arqueólogo descifra y hay cuestiones que son científicas pero hay otras en las que el arqueólogo interpreta. En el documental con todos los elementos hacemos una recreación de cómo podría haber sido el funeral del señor de Sipán. Ahora también se ha descubierto la señora de Kao y ha sido muy importante porque no se sabía el lugar predominante de la mujer.

 

¿Conocemos la diversidad cultural peruana?

No, desde luego. Incluso allí no se conoce mucho. Los españoles cuando llegan se encuentran al inca, y en esa época tampoco había mucho interés por investigar el pasado. Creo que ellos están equivocados en muchos aspectos, por ejemplo cuando atrapan a Pizarro y hablan de lo malos que somos los españoles. Cuando llega Pizarro y los españoles, muchos indios están hartos del incanato porque éste a diferencia de culturas como la moche es la primera que es guerrera. Esto apenas se ha contado. Por supuesto, no significa que Pizarro llegara para salvarles pero sí que no es tan idílico como se piensa.

 

En dos palabras, ¿Qué querías contar con el documental?

Quería que la gente sintiera la arqueología viva, la emoción de lo que estamos descubriendo y lo que queda por descubrir.

 
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